Soy Elliot Riley, estudiante de medicina en el Royal College of Surgeons en Irlanda, y sé perfectamente lo frustrante que puede ser lidiar con productos blanqueadores o irrigadores bucales. Como muchos, he sufrido de encías sangrantes, agua salpicando por todas partes y aparatos dentales costosos que muchas veces decepcionan.
Cuando usaba brackets, pasé años buscando un producto que realmente me ayudara a mantener mi boca limpia y saludable, sin dolor ni estrés. Pero nunca encontré lo que necesitaba. Algunos irrigadores eran demasiado agresivos, otros no lo suficientemente efectivos.
Entonces pensé: ¿por qué no crear yo mismo el producto ideal? Y así nació Smiliant.